Sus hijos Raúl Coronado Navarro y Casildo Coronado Navarro llevan al frente dicho proyecto.
Raúl Coronado lleva el trabajo de la bodega y Casildo Coronado lleva todo el tema de campo, trabajando con los viñedos. Controlamos así directamente todos los procesos que afectan a la buena elaboración de nuestros vinos.
Fue en el año 2004 cuando empezamos a comercializar nuestros vinos, siendo una satisfacción ver como nuestro mayor reto estaba siendo aceptado muy bien.
Aunque sin duda el logro de esta Bodega es porque tratamos a nuestros vinos de una forma y con un sentimiento particular, ya que para nosotros es el mayor estimulo y garantía de hacer unos vinos que deleiten a la gente de una forma especial.